El Castro Rendón incorporó instrumental para cirugías cardiovasculares infantiles

Desde 2007, el Hospital Castro Rendón participa en la Red Nacional de Cardiopatías Congénitas, siendo este uno de los centros tratantes habilitados del país y el único que realiza cirugías cardiovasculares infantiles en la Patagonia. En este sentido, es importante señalar que este año la institución sanitaria incorporó instrumental quirúrgico para efectuar este tipo cirugías. La adquisición del material se realizó a través de fondos del programa de Cardiopatías Congénitas (que se obtienen luego de realizar las cirugías infantiles en el nosocomio), la cual tuvo un costo de $1.895.796.

La compra se realizó por etapas y los materiales (importados), llegaron en diferentes fechas a lo largo de este año. La adquisición incluye separadores, micro tijeras, tijeras porta agujas, pinzas, valvas mangos de bisturí y contenedor para instrumental quirúrgico, entre otros elementos.

Al respecto, la ministra de Salud Andrea Peve resaltó la importancia de esta adquisición en el marco de la estrategia “Primeros Mil Días”, enfocada en políticas públicas de salud para las mujeres desde el embarazo y los niños y niñas que van hasta los dos años de edad, y dentro del Plan Provincial de Salud 2019-2023, en el que se pone de manifiesto el objetivo de garantizar el mejoramiento de la calidad y la homogeneización de la atención neonatal, en especial la alta complejidad.

El director del Castro Rendón, Adrián Lammel, señaló: “Nuestro hospital es el único que realiza cirugías cardiovasculares infantiles en la Patagonia. Este servicio lo brindamos desde el 2007 cuando concretamos un acuerdo con el hospital de Niños de La Plata para que cirujanos y anestesistas vinieran a realizar las intervenciones, fue con la idea de ir dejando con el tiempo capacidad profesional instalada en nuestro hospital”.

En 2007 comenzó el programa nacional de Cardiopatías Congénitas, al que luego se sumaría el Castro Rendón como centro quirúrgico, lo que le permitió integrarse a la Red Nacional de hospitales para estas patologías. “El hospital fue formando su personal y hoy contamos con todo el recurso humano propio que nos permite atender estas patologías”, afirmó Lammel y agregó que desde el inicio del programa ya se han concretado 562 cirugías de este tipo.

Por su parte, Cecilia Pochat, jefa del servicio de Cirugía Cardiovascular Infantil del hospital, indicó: “Es importante la llegada de estos insumos, este nuevo material se incorpora al que ya teníamos y que necesitábamos para poder hacer cirugías en pacientes más pequeños y más delicados. Este año llevamos operados 26 pacientes”.

Además, Pochat señaló: “Dada la situación en la que nos encontramos por la pandemia estamos muy bien con la cantidad de cirugías realizadas, esperemos llegar a operar a 60 o 70 pacientes en todo el año”.

Cabe aclarar que la mayoría de los pacientes intervenidos quirúrgicamente son de las provincias de Neuquén y Río Negro, además de pacientes derivados de diferentes provincias de la Patagonia. “Casi todos los que operamos este año son neonatos y lactantes, la mayoría bebés de dos o tres meses de vida”, detalló la jefa del servicio.

Por otro lado, Pochat apuntó que el equipo de trabajo de cirugía cardiovascular infantil es enorme y que lo conforman cardiólogos infantiles, cirujanos, perfusionista, anestesiólogo infantil, instrumentadoras, terapistas, recuperación cardiovascular, enfermeros, y se sumó el servicio de hemodinamia.

Una cardiopatía congénita es una anomalía en el corazón que, gracias a los controles prenatales, se puede detectar antes de que el o la bebé nazca. Es importante señalar que alrededor de la mitad de los defectos cardíacos congénitos requiere cirugía en el primer año de vida y la mayoría se solucionan con diagnóstico oportuno y tratamiento.

El Programa Nacional de Cardiopatías Congénitas (PNCC), comenzó a implementarse en el 2006. Los objetivos del programa son disminuir la mortalidad infantil por cardiopatías congénitas; mejorar la accesibilidad a las cirugías mediante el desarrollo de centros regionales para las cardiopatías de baja y mediana complejidad; y fortalecer la red de diagnóstico oportuno y estabilización de los pacientes, a fin de mejorar las condiciones de su traslado a los centros quirúrgicos.