Gaido anunció que la Fiesta de la Confluencia sumará un día más dedicado al canto criollo

En homenaje al primer payador neuquino, Juan Quiroga, la ciudad de Neuquén inauguró un monolito y una placa recordatoria que fue descubierta este viernes en uno de los espacios públicos más emblemáticos de la ciudad de Neuquén, la Isla 132 del paseo costero. En este marco, el intendente Mariano Gaido anunció que la  Fiesta de la Confluencia sumará un quinto día dedicado enteramente al folclore, al canto criollo y a la payada.

La fecha elegida para la inauguración y el anuncio no fue casual: cada 23 de julio se celebra el Día Nacional del Payador y el Día Provincial del Payador. Y además, Neuquén es la única ciudad del país que valoriza a la payada como Patrimonio Cultural Intangible a través de una ordenanza promulgada recientemente.

Gaido reconoció en los payadores Juan Parada Curbelo y Maxi Salas, integrantes del Colectivo de Jóvenes Payadores del Interior Profundo, al primer payador neuquino nacido en 1887 en la Isla 132 cuando Neuquén era territorio nacional.

Recordó que “Quiroga tuvo que ir a buscar un futuro fuera de la provincia pero que siempre se golpeaba el pecho y hacía un reconocimiento pleno de su tierra. Hoy nos encontramos con una ciudad que mira hacia adelante, que tiene respeto de nuestra gente y que le reconoce al payador ser actor fundamental de nuestra cultura, tradición e historia”.

“Por eso hemos determinado en la Fiesta de la Confluencia tener un día más, ese quinto día solamente de cultura, de folclore, del payador”, anunció y acto seguido les entregó a los jóvenes oriundos de Senillosa y Chos Malal la Bandera de la ciudad. “Ustedes la representan, la cuidan, es un orgullo para nosotros”, les dijo.