Imputado por tentativa de femicidio quedó detenido

La fiscal del caso María Eugenia Titanti y el asistente letrado Bruno Miciullo formularon cargos ayer a un hombre, J.A.M, por intentar asesinar a su expareja de un disparo en la cabeza en la localidad de Centenario. 

Durante la audiencia la fiscalía además solicitó que el acusado permanezca detenido en prisión preventiva por un plazo de seis meses. 

De acuerdo a la investigación, el hecho ocurrió el 29 de noviembre pasado. Esa tarde el acusado fue hacia una vivienda ubicada en la ciudad de Centenario, en la cual se encontraba la víctima. Allí, J.A.M con la excusa de querer tomar algo fresco, le pidió a la mujer que lo dejara ingresar. Una vez en el interior, agarró el arma de fuego y comenzó a disparar, alrededor de siete veces, en dirección a la víctima. Ante el pedido de auxilio de la mujer, llegaron familiares de ella, a quienes también intentó dispararles el imputado. Luego se retiró del lugar. Momentos más tarde regresó, disparó hacia la puerta e ingresó a la vivienda. Agarró del cuello a la víctima y le disparó en la cabeza. Posteriormente se dio a la fuga.

La víctima fue trasladada al Hospital y fue intervenida quirúrgicamente. 

Titanti explicó que el imputado mantuvo una relación de pareja y convivencia de aproximadamente siete años con la víctima, hasta agosto de este año. También detalló que J.A.M cuenta con una condena de prisión en suspenso por un caso anterior de abuso sexual.

El acusado permaneció prófugo desde el día del hecho y ayer quedó detenido por la tarde, luego de que se presentara en la sede del departamento de Seguridad Personal de la Policía de Neuquén. 

El delito que la fiscalía le atribuyó a J.A.M es homicidio agravado por haber sido cometido por un hombre a una mujer con quien había mantenido una relación de pareja y también por haber sido cometido en un contexto de violencia de género, agravado por el uso de arma de fuego, en grado de tentativa y en calidad de autor (artículo 80 inciso 1 y 11, artículos 41 bis, 42 y 45 del Código Penal). 

Como medida de coerción, Miciullo requirió que J.A.M quede detenido con prisión preventiva por un plazo de seis meses. Argumentó su pedido en la existencia de los tres riesgos procesales: peligro de entorpecimiento de la investigación, peligro de fuga y peligro para la integridad de la víctima. “Entendemos que la prisión preventiva es la única que puede, no solamente resguardar los fines del proceso para que el imputado llegue a juicio y los testigos puedan declarar en libertad, sino también para resguardar la integridad física de la víctima”. 

La jueza de garantías que dirigió la audiencia avaló la formulación de cargos e hizo lugar al pedido de prisión preventiva que requirió la fiscalía, por el término de seis meses. Respecto al plazo de investigación se estableció en tres meses.